En interés de la justicia

«En interés de la justicia» (Nancy Taylor Rosenberg, 1995) es una historieta con una estructura similar a la red de una araña. Todo conectado… y con una inexplicable resolución, casi desesperada por dar un fin al libro.

Cuenta la historia de Lara Sanderstone, una juez a la que por el asesinato de su hermana y cuñado, que debe cuidar de Josh, su sobrino adolescente resentido por la sanguijuela de su padrastro.

Lara cuenta con la ‘simpatía’ en el trabajo de la juez Irene Murdock. Además, de contar con el apoyo del sargento Ted Rickerson, encargado del caso, con quien acaba liándose en unas escenas que no van más allá de relleno; y su amigo informático, Emmet Daniels, que tiene problemas de movilidad.

En sí el libro no aporta más que las expectativa de Taylor por hacerse un hueco en el mundo literario en una historia que termina con pedofilia encubierta, al más alto nivel judicial, e investigaciones por corrupción entrecruzadas.

Me recuerda a «La verdad sobre el caso Harry Quebert» (Joël Dicker, 2012), de hecho, recomiendo la lectura si no hay nada más que leer y se quiere llenar un tiempo ya de por sí pérdido.

La verdad de los ‘autores’

Hace unos años mientras estaba en el tranvía hablando con Pedro Luis, comentó que estaba leyendo «La verdad sobre el caso Harry Quebert» (Joël Dicker, 2012) y que si no tenía nada que leer lo leyera.

Lo estuve buscando el libros por temporadas hasta que un amigo, hace pocos días, me lo regaló por mi cumpleaños. También me regaló un comic cuando se enteró que me gustan.

El libro intenta contar la amistad entre dos ‘ escritores’, que al ser uno (Harry Quebert) de ellos arrestado por el asesinato de Nola, una cría de 15 años, a la que se había dado por desaparecida las últimas tres décadas. Marcus Goldman está seguro de la inocencia de Quebert y busca limpiar el nombre de su buen amigo.

En la historia se intercalan flashback y el presente de Goldman que junto con el sargento Gahalowood resuelven un <caso congelado>  que terminó con tantos culpables como víctimas, por proteger a otros o por miedo a que se desvelen inquietantes  confesiones.

Una narración por buscar la verdad que en pueblo costero, sin saber que no es ahí donde están los orígenes, y que como misterio está todo relacionado. Hacen que no lo ven hasta el final. Una historia de ‘ amor- capricho-celos-confusión- deseo- ‘ disfrazada de crimen.  El precio que se pagó por la fama, por querer ser; olvidar quién es; la automentira a la que los personajes sucumbieron, de una manera u otra.

Un final nada sorpresivo, esperado y mal puesto, ¿faltan casi doscientas páginas, no han resuelto preguntas que se abrieron en la investigación y quieren terminar con algo que no cuadra? ¡Claro! Ya entiendo que recomendará la lectura si no tenía nada que leer.